Las piezas estaban en el Museo Provincial Antonio Serrano desde 2007, cuando fueron secuestradas por Gendarmería en medio de un traslado ilegal. Pesan más de 2000 kilos y se debió montar un operativo de envergadura para sacarlas del edificio de calle Gardel 62. La restitución a su lugar de origen fue acordada por los gobiernos de ambas provincias.
En un operativo que demandó varias horas y un despliegue inusual, dos fragmentos de meteoritos que permanecieron durante 17 años en el Museo de Ciencias Naturales y Antropológicas “Profesor Antonio Serrano” de Paraná fueron restituidos este lunes por la provincia de Entre Ríos a Chaco, lugar de donde habían sido extraídos de manera ilegal.
El museo, dependiente de la Secretaría de Cultura provincial, mantuvo en guarda y custodia a ambas piezas, cumpliendo el rol de autoridad de aplicación otorgado por la Ley Provincial N° 9686 de “Protección del Patrimonio Arqueológico y Paleontológico”, en concordancia con la Ley Nacional 25.743.
Las piezas llegaron a la institución en 2007, tras un procedimiento realizado por Gendarmería Nacional el 23 de febrero de ese año. En un control vehicular, en la intersección de las rutas nacionales 12 y 14, del departamento Islas de Ibicuy, efectivos secuestraron los fragmentos, que estaban siendo trasladados con la intención de sacarlos fuera del país. Tras las constataciones de rigor, la Justicia los cedió en guarda a la provincia y el Museo Antonio Serrano albergó a ambas piezas hasta ahora.
El traslado se realizó en el marco de un convenio rubricado a principios de enero pasado por los gobernadores de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, y de Chaco, Leandro Zdero. Los mandatarios convinieron la restitución de las piezas, consideradas un valioso patrimonio cultural y científico, a Campo del Cielo -reserva natural chaqueña que alberga los restos de una de las mayores lluvias de meteoritos ocurrida hace unos 1600 años-, de donde habían sido sustraídas.
Las actuaciones incluyen la firma de un acta por parte de los Fiscales de Estados de ambas provincias: Roberto Alejandro Herlein, de Chaco, presente junto a otros funcionarios de su provincia en el operativo, y el entrerriano Julio Rodríguez Signes. Este paso se realizará este martes.
Vuelven al lugar de origen
Fabián Reato, secretario de Cultura de Entre Ríos, quien siguió de cerca el trabajo en el museo junto a integrantes de su equipo, dijo que se c
umplió con lo acordado por las provincias: la restitución de los meteoritos a su lugar de origen. Recordó que se trata de piezas que fueron sustraídas ilegalmente, de “gran valor cultural y científico que deben ser restituidas al lugar de donde no debieron haber sido extraídas”.
Seguidamente mencionó que, a partir de la firma del convenio en enero, se comenzó a trabajar para coordinar “el operativo que fue muy complejo porque se trata de piezas de gran peso”. Por ello, resaltó que se empleó una manera de traslado que preservara el edificio del museo, lugar que es parte del patrimonio cultural e histórico de la provincia. Así, se empleó una grúa que desde calle Gardel levantó los fragmentos por sobre los techos, evitando el paso por los pisos y espacios de la casa. El operativo estuvo a cargo de la provincia de Chaco.
Agradecimiento
Libio Gutiérrez, Coordinador de Gabinete de Chaco, fue uno de los funcionarios que estuvo al frente del procedimiento por su provincia. “Agradecemos al gobernador de Entre Ríos por la actitud y, sobre todo, porque de esta manera se demuestra que con la cooperación entre nuestras provincias se pudo lograr la restitución de patrimonio cultural”, expresó.
Seguidamente, dijo que “los meteoritos tienen un valor muy importante a nivel mundial” y con la concreción de la restitución se ha resuelto una cuestión judicial, ya que recordó que en su momento se había iniciado una acción ante juzgados Federales. Sucede, remarcó, que hay convenios internacionales en materia de patrimonio cultural que establecen que los objetos deben estar en su lugar de origen. “En este caso, los meteoritos fueron sacados de Campo del Cielo”, por traficantes, añadió.
Por último, informó que “tienen una composición metálica muy especial que no existe en el mundo. Los meteoritos de Campo del Cielo no son rocosos, son metalíferos”. Por ello tienen mucho peso. En el caso de las piezas trasladadas, una pesa alrededor de 1600 kilos y la más pequeña, 600 kilos.
Cómo fue el operativo
Uno de los meteoritos, el más grande, estaba en la galería del museo debido a que por su tamaño y peso debió quedar desde el inicio en ese espacio, sobre una base de hierro especialmente construida. El otro estaba en el interior de una de las salas. Por la mañana comenzaron las tareas de remoción de los fragmentos, lo que requirió la fuerza de un grupo de operarios que dejaron ambas piezas en la parte del patio a cielo abierto para luego, a través de una grúa de gran porte, ser levantados y trasladados por arriba del techo del museo hasta un camión estacionado sobre calle Gardel. El acarreo fue de a una pieza, demandó más de dos horas y el despliegue de un operativo de seguridad y corte de tránsito.–